sábado, 17 de diciembre de 2011

Película: El juego de la fortuna

Dirección: Bennett Miller
Actores: Jonah Hill, Brad Pitt, entre otros
Género:
Origen: Estados Unidos, 2011
Duración: 133 minutos
Calificación: Apta para mayores de 13 años
http://www.moneyball-movie.com/

El título original de este film es “Moneybal” basada en una historia real, del director Bennett Milller (“Capote”), producida y protagonizada por Brad Pitt, su relato está relacionado con los Atléticos de Oakland, un equipo de béisbol que salió a flote a partir de las estadísticas, número, promedios, entre otras situaciones y quedo además como el manager que rechazó el mejor pago de la historia (ofrecido por otro equipo, en Boston).
Este es el deporte más popular de Estados Unidos, Japón (actual campeón del Clásico Mundial de Béisbol), Canadá, Corea del Sur (actual campeón olímpico), entre otros; podríamos decir que no es tan a fin a nosotros, por esta causa cuando veía su desarrollo pensé en un momento en el futbol local y que vive situaciones similares.
En este relato el manager es Billy Beane (Brad Pitt), un ex beisbolista que ahora debe armar el equipo e interceder en el mercado de pases; esta es una temporada difícil como tantas otras, con poco presupuesto, tiene que sustituir a tres estrellas y ganar.
Es cuando lo contrata como asistente a Peter Brand (Jonah Hill), un jovencito egresado de la Universidad, este a través del análisis de datos, estadísticas, busca los jugadores más económicos, con buen rendimiento y que fueron echados de otros equipos.
Cuando las historias llevan la leyenda basada en hechos reales tienen un plus extra, aquí el Atléticos de Oakland en 2002 logro el record 20 victorias seguidas, el mentor de esto fue Bill Beane y logró levantar un equipo casi sin dinero; y el mismo estaba a cargo del entrenador Art Howe (Philip Seymour Hoffman), quien no cree en Bill y no está muy convencido de los métodos utilizados.
Tiene una muy buena actuación del maduro actor Pitt (48) que se compromete con el papel y seguramente irá en busca del premio tan deseado , el “Oscar”; está apoyado por un sólido guión de Aaron Sorkin (“Red Social”, “Cuestión de honor”) y Steven Zaillian (“La lista de Schinlder”, "American gangster”) y la estupenda fotografía de Wally Pfister (“Memento”, “Origen”, "Batman: el caballero de la noche asciende").
Otros personajes importantes como: el entrenador Art Howe (Philip Seymour Hoffman), algo desaprovechado; el de Chris Pratt, es Scott Hatteberg un jugador de béisbol que necesita desesperadamente una inyección de confianza; Kerris Dorsey es Casey Beane la hija de Beane quien nos deja una canción alentadora, entre otros.
Con ciertos reparos recordé otra película que habla del deporte “Un domingo cualquiera”, entre otras; en esta se utilizan algunos términos de béisbol, y a pesar de esto no se necesita conocer el béisbol para saber lo que está pasando, es relativamente simple y comprensible, no necesito del discurso moral y de himnos para levantar el ánimo.
Y en la trama por supuesto no falta el partido decisivo filmado con cámara lenta, dándole el suspenso y la emoción manteniendo a la platea atenta al desenlace y dejando un buen mensaje.

Mi Opinión: Buena
Por: Susana Salerno

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